Socialistes de Vinaròs

Desescalada. Fernando Juan, Regidor de Governació i Recursos Humans.

Entramos en mayo, un mes que va a ser recordado por el conjunto de medidas que se van a ir aplicando progresivamente en todos los sectores de nuestra Sociedad, y que se resumen bajo el nombre del proceso en el que se encuentran inmersas: DESESCALADA.

Tras prácticamente 8 semanas, el periodo de confinamiento de la población, realizado con el objeto de disminuir la tasa de contagios por el COVID-19, parece que llega a su fin. Es una realidad en cifras esta disminución, y es hora de iniciar este desconfinamiento. Desde el punto de vista sanitario, según unos criterios claros, y poco a poco, para ir revisando el progreso, desde el punto de vista económico, con urgencia, para evitar un deterioro mayor de la economía. Desde el punto de vista social, necesario, puesto que el esfuerzo psicológico ha sido brutal. De hecho, la psicosis y el miedo en muchas personas no solo es latente, es palpable en redes, conversaciones y medios de comunicación diversos. Miedo al contagio, miedo a volver a la situación previa, miedo, también, a equivocarnos.

Y este es el peligro. A anteponer economía a salud pública, pero también a no menospreciar la capacidad psicológica de aguante de una sociedad que sale, y lo hemos visto este fin de semana, como sea, a la calle. Necesidad psicológica, necesidad física, necesidad social, necesidad, al fin y al cabo, de una situación no vivida por nadie anteriormente, pero que se esta reproduciendo en todas las sociedades occidentales.

Y en nuestra ciudad sucede lo mismo, copia de todas las poblaciones donde se inicia la desescalada: muchísima gente en la calle, a pie, en bici, corriendo. Muy pocos coches circulando, y dificultades para cumplir las nuevas normas de separación social. Este es el trabajo en el que actualmente el equipo de gobierno, y nosotros los socialistas, nos encontramos. Desescalada en fases, fases de movilidad, fases de aperturas de locales, comercios, terrazas, empresas, servicios públicos, retorno al fin y al cabo a un trabajo que va a cambiar, en muchos casos, totalmente. Repensar ayudas, subvenciones, tasas, fiscalidad, materiales de protección, protocolos de actuación, programas, situaciones totalmente nuevas en las que hemos de escuchar a técnicos, miembros de los distintos sectores de la sociedad, y, sobre todo, mucha imaginación. Y por encima de todo esto, la precaución, el saber que es fácil, muy fácil, equivocarse, y disponer de un plan alternativo y la responsabilidad de, por si es necesario, volver atrás y comenzar de nuevo. Y es que nos jugamos sencillamente LA VIDA. Ahí es nada.

Fernando Juan
PSPV-PSOE Vinaròs